
Hay poetas que al escribir sus versos reflejan el alma de los niños. En el niño, las imágenes son vía de comprensión del universo; en el poeta, creación. La literatura española tiene una tradición de poetas que escriben para niños. Decía Juan Ramón Jiménez que “no hay arte popular, sino tradición popular del arte”. De la misma forma, parafraseándole, podríamos decir que no hay poesía infantil sino tradición popular de la poesía infantil. El padre de esta tradición, dentro de la literatura contemporánea, es un indio chorotega: el poeta nicaragüense Félix Rubén García Sarmiento, conocido por todos como Rubén Darío (1867-1916). Darío no sólo revolucionó la poesía de “la leona castellana y sus veinte cachorros americanos” sino que reinició una corriente lírica de poesía para niños que llega hasta nuestros días y que alcanza su máxima expresión en tres poetas andaluces de dimensión universal: Juan Ramón Jiménez, Federico García Lorca y Rafael Alberti.
|
|